Un brujo del mal que oía el programa consiguió su dirección, llamó a sus
secretarios y ordenó que compraran alimentos y los llevaran hacia la mujer,
con la siguiente instrucción: Cuando ella pregunte quien mandó estos
alimentos, respondan que fue el DIABLO!
secretarios y ordenó que compraran alimentos y los llevaran hacia la mujer,
con la siguiente instrucción: Cuando ella pregunte quien mandó estos
alimentos, respondan que fue el DIABLO!
Cuando llegaron a la casa, la mujer los recibió con alegría y fue
inmediatamente guardando los alimentos que le llevaron los secretarios del
brujo.
inmediatamente guardando los alimentos que le llevaron los secretarios del
brujo.
Al ver que ella no preguntaba nada, ellos le preguntaron: ¿La señora no
quiere saber quién le envió estas cosas?
quiere saber quién le envió estas cosas?
La mujer, en la simplicidad de la fe, respondió:- No, mi hijo.. No es
preciso. Cuando Dios manda, hasta el diablo obedece!
preciso. Cuando Dios manda, hasta el diablo obedece!
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