Aquellas españolas que se encuentren dentro de las 14 semanas de gestación podrán presentarse en un hospital o clínica para abortar sin necesidad de presentar ninguna justificación. En casos excepcionales, ese plazo queda extendido hasta las 22 semanas. Así lo especifica la Ley de Salud Sexual y Reproductiva que fue aprobada hace 6 meses atrás, pero entra en vigor a partir de hoy en medio de fuertes polémica y manifestaciones en contra secundadas por la Iglesia Católica y miembros del conservador Partido Popular.
De esta forma, de acuerdo a la flamante norma interrumpir el embarazo voluntariamente dejará de ser así un delito despenalizado en algunos casos, para convertirse en un derecho, precisamente cuando se cumplen 25 años de la aprobación de la primera ley, en 1985, que permitió que un total de 1.300.000 mujeres abortaran en España.
El tramite para esta interrupción se inicia totalmente gratis, con un primer período obligatorio de tres días de reflexión en el que la mujer deberá leer toda la información que contiene un sobre con sus derechos legales y la asistencia del Estado. Cumplido el plazo, si la ciudadana insiste en su decisión se preparará la consulta médica para la intervención.
Para el movimiento feminista y su lema “Aborto es cosa suya: Esto es un” logro historico”.
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