jueves, 26 de agosto de 2010

Una transexual agrede a un miembro de una iglesia evangélica de Madrid en pleno culto





Así lo refieren los asistentes al acto religioso, aunque lo que cuenta la transexual, de origen nigeriano, es exactamente lo contrario, siendo ésta última versión la que ha sido difundida por diferentes medios de comunicación sin haber antes contrastado la información con los representantes de la iglesia. La Iglesia Christ Embassy lleva 10 años abierta y trabajando en Madrid, con su templo situado en una zona industrial del barrio de Vallecas. Es miembro del Consejo Evangélico de Madrid, entidad que representa a los evangélicos madrileños ante el Gobierno autonómico, con el que tiene Acuerdos de cooperación firmados desde 1995. Nunca ha tenido la Iglesia Christ Embassy ningún tipo de problema con la vecindad, ni tampoco hasta este pasado 8 de agosto con una de las personas que asiste desde hace más de un año a sus cultos, de nacionalidad nigeriana, aún después de revelar su condición de transexual.
Sin embargo la Asociación Española de Transexuales –que en ningún momento ha contactado con los responsables de la iglesia- ha declarado que “comenzó a sufrir humillaciones y discriminación por identidad de género por los miembros de la iglesia al descubrirse su transexualidad, siendo apartada paulatinamente de sus funciones que desempeñaba de forma voluntaria”; siendo esto último inexacto porque era una “simple asistente que nunca tuvo responsabilidad alguna en la iglesia” explica el pastor de la iglesia Andrés Martín a Protestante Digital.
AGRESIÓN EN PLENO CULTO
Pero lo que ha supuesto que se denuncie a la iglesia por la vía legal y en los medios de comunicación es que en el culto del pasado domingo 8 de agosto se produjese una trifulca en medio del propio acto religioso.
La prensa y diversas agencias (también sin haber hablado con ningún responsable de la iglesia o testigo de los hechos fuera de la propia transexual) ha difundido que “la mujer fue `atacada violentamente´ por un pastor de esa iglesia”. Los hechos, según los miembros de la Iglesia y el propio pastor, son muy diferentes. Al finalizar el culto, como es costumbre en la iglesia, se pidió que todos se diesen la mano para una oración final. Una de las personas que estaban al lado de la transexual nigeriana (un miembro de la iglesia, no un pastor) no lo hizo, “recibiendo de manera inesperada y ante el asombro de todos una serie de golpes por parte de la persona transexual con su bolso, sin que en ningún momento respondiese a la agresión salvo el intentar impedir que se le continuase golpeando” expone el pastor de la Iglesia, que estaba presente desde el púlpito en el momento del inicio de la trifulca.
Refieren los medios y la Asociación Española de Transexuales que todo ocurrió “en presencia de los feligreses, que permanecieron inmóviles ante lo sucedido”, cuando al contrastarlo de nuevo tampoco coincide con lo que relata Antonio Andrés Martín: “Los responsables de orden de la iglesia intentaron separarlos de inmediato, algo que fue sencillo con el miembro de la iglesia que había sido agredido por la transexual, pero no con ésta, que se resistía a ser alejada del salón de cultos a otra dependencia cercana, que no echada de la iglesia como se ha dicho”.
Tras calmarse los ánimos y el revuelo, la persona transexual llamó a su abogado y puso una denuncia legal por lo ocurrido alegando haber sido atacada físicamente, mientras que el miembro agredido por ella ha realizado la misma acción legal por su parte.
REACCIONES INSTITUCIONALES
A pesar de que nadie ha verificado lo ocurrido –insistimos- acudiendo a las fuentes autorizadas de la iglesia evangélica Christ Embassy para contrastar los hechos, la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGTB) se ha solidarizado con esta mujer y ha exigido “la inmediata destitución” del pastor, así como la revisión por parte del Ministerio de Justicia, como organismo regulador de las distintas confesiones religiosas en España, de esta comunidad evangélica. “Condenamos la agresión rotundamente y esperamos que caiga todo el peso de la ley sobre el agresor y sus colaboradores, ya que nadie la ayudó ni asistió, teniendo en cuenta el agravante de ´transfobia´ que ha suscitado el ataque”, ha remarcado la coordinadora del Área Trans de la FELGTB, Mar Cambrollé.
Por su parte, los representantes del Consejo Evangélico de Madrid han hecho público un Comunicado de prensa en el que además de recoger los hechos tal cual los expone el pastor de la iglesia lamentan que se haga un “juicio público paralelo” de una información que no está contrastada, y defiende la seriedad y trayectoria de la iglesia y de su pastor “que merecen todo el respeto y fiabilidad en el relato de los hechos, y como mínimo la presunción de inocencia mientras no se demuestre lo contrario, como debe ocurrir en un estado de derecho”.

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